Los servicios que la requieran, incluirán una visita inicial sin cargo. De esta manera, se podrá conocer mejor y evaluar el espacio a organizar. Luego de la visita, se confecciona un plan de trabajo con los pasos a seguir, alcance del trabajo y costo. Si se acepta el presupuesto, se solicita una seña por un porcentaje de este.

Luego de realizado el trabajo, se realiza un seguimiento para analizar los resultados y realizar ajustes de ser necesario.

Su costo está a cargo del cliente, pero también puede suceder que no sean necesarios. En el caso de precisarlos, se pueden barajar varias maneras de adquirirlos: que el organizador se encargue, que el cliente se encargue (siempre de acuerdo a la recomendación del profesional) o cliente y organizador realizan la compra juntos.

No, eso depende de cada situación. El método de Marie Kondo no es la única manera de ordenar. Si alguien es feliz con un archivo enorme en la oficina o con 500 carteras, y tiene lugar, entonces no hay razón para descartar.

Hay cuatro opciones: si lo descartado está en buen estado, se puede donar o vender dependiendo del bien. Si está en malas condiciones se tira o se analiza un posible reciclaje para otro uso.

El costo va a depender del espacio a ordenar; se presupuesta en base a la visita (que puede ser virtual).

Contamos con amplias formas de pago. Consultar.